Echo de menos un lugar
que aún no conozco.
De fango soleado
y sal anisada.
Me olvido de los sueños
que aún no he dormido,
de las tablas a la deriva
de los años de aniversario.
Las estrellas versan sueltas
mutilando a la luna menguante,
Espero las noches de primavera
de algún año del algodón en espeto.
El parque nunca me quedó tan lejos.
El baño siempre encaló los espejos.
Los negros laman a fiesta calle abajo
Los peces de las fuentes aún rezan a diario.
Los peces de las fuentes
aún comen
lo que les echan.
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